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Fonds documentaire dynamique sur la
gouvernance des ressources naturelles de la planète

Version française de cette page : L’emploi agricole, un défi historique

El empleo agrícola, un reto histórico

Es un imperativo luchar contra las exclusiones campesinas !

Rédigé par : Henri Rouillé d’Orfeuil

Date de rédaction :

Organismes : Association pour contribuer à l’Amélioration de la Gouvernance de la Terre, de l’Eau et des Ressources naturelles (AGTER)

Type de document : Article / document de vulgarisation

La OIT indica que hoy en día hacen falta 900 millones de empleos para permitirnos a todos trabajar y obtener un beneficio por la realización de ese trabajo. Esta cifra corresponde aproximadamente a la suma de los parados / desempleados registrados en los países de la OCDE y de las personas que el Banco Mundial sitúa dentro de la “extrema pobreza”. Sólo tiene en cuenta los activos, es decir el número de personas de más de 15 años y menores de 65, que corresponde en la actualidad al 64% del total de la población mundial. De hecho, las estadísticas de empleo y desempleo son inutilizables, porque ciertamente solamente se registran como desempleados aquellas personas que pueden obtener de esta situación algunas subvenciones o ayudas. ¿Para qué serviría sino hacer este trámite? Haría falta por tanto que pudieran crearse inmediatamente 900 millones de empleos o equivalentes para que salgan de la exclusión aquellos y aquellas que no obtienen ingresos o que obtienen sólo rentas irrisorias por su trabajo.

El Banco Mundial eligió tratar este año la cuestión del empleo en su Informe sobre el estado del mundo 2013. Este informe se titula « Jobs » y en su portada se presenta gráficamente la traducción de la palabra « empleo» a 71 lenguas diferentes. Un cuadro explicativo, el « propósito de la portada » indica que se trata de una palabra difícil de traducir, ya que la misma noción de empleo varía mucho según las diferentes culturas y lenguas. Lo esencial del « compendio » de 50 páginas concierne a las pro-puestas o a las soluciones planteadas a este problema mundial que es el empleo. La naturaleza del contenido del informe no es del todo sorprendente para nosotros. Se expresa por una serie de ecuaciones: Empleos = Crecimiento, Crecimiento = Dinamismo del sector privado. Desgraciadamente, el potencial del sector privado no se puede desarrollar porque los poderes públicos levantan obstáculos que frenan a las empresas e impiden la auto-regulación de los mercados. La lucha por el empleo y la búsqueda del pleno empleo tiene como primer objetivo levantar esos obstáculos. Las soluciones pro-puestas por el Banco Mundial no son sorprenden-tes, y no merecen por lo tanto un examen detalla-do.

Los cálculos del Banco Mundial

Lo más interesante son las cifras. El Señor Jim Yong Kim, Presidente del Grupo del Banco Mundial, nos anuncia que existen 200 millones de desempleados, una cifra 4,5 veces menor que la que muestra la OIT. Como ni una ni otra organización han contabilizado las personas desempleadas, esta diferencia deriva de la interpretación de las cifras.

En efecto, las cifras no tienen el mismo valor. A continuación se muestran algunas citas y definiciones para comprender bien lo que está en juego.

« En los países en desarrollo, cerca de la mitad de la población activa está compuesta por agricultores o trabajadores por cuenta propia que permanecen así fuera del mercado laboral. »

  • Se eliminan de esta forma 1.500 millones de campesinos y trabajadores independientes.

« El mundo cuenta con más de 3.000 millones de personas activas con empleos muy diversos. 1.650 millones de ellos son contratados y reciben una remuneración o un salario regular, pero los otros 1.500 millones se dedican a realizar actividades agrícolas, trabajan dentro de pequeñas empresas familiares, o bien tienen una ocupación como jornalero o trabajador estacional. En paralelo, 200 millones de personas –en su mayoría jóvenes, se encuentran en desempleo y en situación activa de búsqueda de empleo. Cerca de 2.000 millones de adultos en edad de trabajar -entre los que se encuentra una mayoría de mujeres- no trabajan y no se encuentran en situación de búsqueda de empleo, aunque no se conoce cuántos de ellos aspiran a obtener uno. »,

  • Se eliminan así 2.000 millones de adultos que no trabajan !

¿Conclusiones? Si ignoramos a 1.500 millones de campesinos y a 2.000 millones de personas qué « no » " trabajan », es decir el 65 % de la población activa mundial, ¡nos acercamos a una situación de pleno empleo!

Nos reencontramos aquí con una hipótesis oculta del « modelo macroeconómico de equilibrio general » que sirve, entre otras cosas, para prever el impacto de las medidas de liberalización o de protección sobre las economías de diferentes países del mundo. Dicho modelo predice que cuantas menos limitaciones haya en los intercambios, más largo y fluido será espacio de dichos intercambios, y por tanto mejor y más cerca de la situación optima estaremos. Este modelo, que sirve de herramienta central en las negociaciones de la OMC, tiene como hipótesis no explícita que hay pleno empleo generalizado. Deja claro que la exclusión de los campesinos de la agricultura es siempre positiva, ya que el pleno empleo permite a todos encontrar otro empleo más productivo. Hace algunos años, Coordinación Sur empujó a Carnegie, un prestigioso Think Tank de Washington, a añadir una limitación vinculada a la escasez de los empleos no cualificados y a introducir la noción de desempleo… Añadiendo una sola ecuación (sobre cerca de 20 000), los resultados de las medidas de liberalización, que provocan concentraciones de tierra y de riqueza y exclusiones económicas, acaban en resultados globales muy distintos y claramente negativos para los países más pobres (PMA).

¿Es posible imaginar la evolución del Mercado internacional del trabajo de aquí a 2050?

Echando una última ojeada a los cálculos del Banco Mundial, obtenemos una « pequeña » cifra para el año 2020, comparada, no sabemos por qué, a 2005:

«Para mantener constante la tasa de actividad de la población en edad de trabajar, hará falta en 2020, unos 600 millones de empleos más que en 2005».

Pero ¿por qué tener como objetivo mantener la tasa de actividad que es sólo la cifra inversa a la del desempleo? ¿ Es esta tasa satisfactoria? A decir verdad, es imposible hacer una proyección de la evolución del mercado internacional del trabajo, incluso a corto plazo, ya que es imposible prever las cifras de creación de nuevos empleos en el futuro. Podemos en cambio tener una idea de la evolución de la de-manda de empleo.

Esta evolución responde principalmente a tres cifras más o menos previsibles:

  • Una es previsible, ya que corresponde a los excluidos / solicitantes de empleo de hoy en día - la OIT habla de 900 millones, un cálculo más preciso nos hace preferir la cifra de 850 millones para guardar una homogeneidad de método de cálculo, poca importancia tienen las centenas de millones-;

  • La segunda cifra es más o menos admitida por la mayor parte de los demógrafos y la Oficina de la población de la ONU, es la cifra de las personas recién incorporadas al mercado de trabajo que provienen del crecimiento demográfico - seremos 2.000 millones más en 2050 – lo que quiere decir 1.300 millones de demandantes suplementarios de empleo -;

  • Para finalizar, existe una tercera cifra más aleatoria, que hace referencia a las personas recién llegadas por la destrucción de empleos - consideramos que dentro de la agricultura en un contexto de liberación e integración de los mercados de productos agrícolas y de la tierra, el mundo va a llegar a tener solamente alrededor de un 3% de personas activas en la agricultura, lo que quiere decir que va a perder un 37% de su población agrícola, 2.600 millones de personas y 1.690 millones de activos, sin tener en cuenta la destrucción de empleos en otros sectores como la administración pública, el pequeño comercio, la artesanía … Poca importancia tienen las centenas de millones de empleos que no contamos, porque de todos modos no llegaremos indemnes en 2050 con cifras de exclusión de esta amplitud. ¡ La suma de estas tres cifras (850 + 1.300 + 1.690), nos da una necesidad de creación de 3.800 millones de empleos!

¿Podremos crear 3.800 millones de empleos de aquí a 2050?

Lo menos que podemos decir es que será difícil y que, si hay que hacer todo lo necesario para crear el mayor número posible de empleos, es un imperativo hacer todo lo posible también para evitar la destrucción de empleo. Será particularmente importante en la agricultura, que se convertirá probablemente en el mayor proveedor de empleo, por el mero hecho de que la producción agrícola represen-ta todavía el 40 % del trabajo mundial. Es por tanto un imperativo luchar contra las exclusiones campesinas.

¿Sabemos a qué se debe hoy la disminución del empleo agrícola? Existen ciertamente unas migraciones voluntarias de trabajadores agrícolas, a menudo fundadas sobre ilusiones en términos de empleos urbanos. Pero la causa principal de estas salidas proviene, de hecho, de las exclusiones que resultan de los procesos de concentración producto de la competición en los mercados de productos agrícolas o mercados de tierra.

Cada semana, un millón de campesinos deja la agricultura, quedándose excluidos en zonas rurales o migrando hacia los suburbios. El director general de UN HÁBITAT decía en un coloquio en junio de 2011: « esta urbanización sin industrialización, es como si pusiéramos bombas atómicas alrededor de todas las ciudades africanas ». Estos mecanismos de exclusión deben ser combatidos y la única manera de hacerlo es permitir que los campesinos puedan vivir dignamente de su trabajo.

 

Henri Rouillé d’Orfeuil

Academia de agricultura de Francia

Paris, Febrero 2013.

Traducido por Clara Martín